Sunday, June 10, 2007

Una tarde Barroca

Paola dijo el viernes, que el fin de semana todavía no había comenzado y ya sentía que lo extrañaba porque siempre es tan breve.

Recordé esa sensación que tiene uno de niño de que el sábado puede hacer lo que quiera y dormirse a la hora que quiera porque después de todo tiene TOODOOO el domingo para "reponerse" y siempre es la tarde del domingo taaannn larga y aburrida.

En lo particular en este momento puedo entenderlo lo del fin de semana que se va como agua, cuando llego a mi casa del francés sabatino ya son cerca de las 16 horas y si algo más se va a hacer ya debo tener el plan porque me pongo como energúmeno si no es así.

Bueno ayer tuve examen (gracias Ixtabai) y aprobé por cierto, pero salí aún más tarde de lo acostumbrado, se nota que mi maestro es medio novato en eso del papeleo (la labor del docente no termina cuando salimos del salón, oh no, esos cochinos papeles que hay que llenar y entregar en fechas que pueden llegar a parecer arbitrarias) y por ello nos dio tiempo de jugar "basta" un buen rato, de hecho lo hicimos mientras nos tocaba el examen oral, obvio nos deteníamos cuando a alguien le llegaba su turno, pero de cualquier modo fue una larga espera, afortunadamente ya tenía plan, me fuí a casa de mi gran amiga Paulina y de ahí visitamos el adorable centro de la ciudad (en serio es tan triste que el Zocalo y sus calles aledañas estén tan sucias y ocupadas por comerciantes, a mi hace mucho tiempo que dejo de gustarme ir, entre las sempiternas manifestaciones y la basura ya no me dan muchas ganas) teníamos tiempo de sobra hasta que llegó el momento de buscar donde comer porque el "joven" se tomo su bendito tiempo, bueno el lugar estaba lleno pero no todos ponían el mismo empeño, ya después les contaré, ella temía que el concierto que quería ver en el Antiguo Colegio de San Ildefonso estuviera abarrotado, pero no fue así, tenía eones que yo no posabas mis piececillos por ese lugar, el concierto fue bastante bueno y me enteré de algunas cosas que ignoraba, yo creía que toda la música barroca era del viejo continente, pero no fue así y de hecho el director vertio luz sobre algunos temas, bastante bueno.

Muy pocos jovenes en la concurrencia, pero enfrente de mi había una niña de unos siete u ocho años, una aplaudidora compulsiva, en cuanto escuchaba una pausa más prolongada de lo habitual ya tenía los brazos separados esperando brindar su ovación a los "performers", su hermano medio odiosito y su papá falto de paciencia, pero enternecedora esa niña.

Obviamente no tome fotos, capaz que la gente encargada de la conservación me embalsama en castigo.





Al parecer este concierto coincidia con el fin de la expo "revelaciones" , la cual no ví o más bien no he visto porque termina el 24 de Junio, esperó tener "chance" de ir

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