[Escrito durante el vuelo a Mexicali
Voy por n-sima vez camino a Baja California, regreso el día Viernes ya muy tarde por la diferencia de horarios y como siempre por X o Y razones mis planes de irme de compras a San Diego fueron arruinados en mi casa.
No me emociona nada particularmente de este viaje, sólo soy feliz por no estar en la oficina, me da exactamente igual que terminé o no el año, yo no festejo ni Navidad ni año nuevo, estoy muy decepcionado de las tías y de las personas que dicen ser mis amigas, aunque no quiera esto me está haciendo más desconfiado, receloso y amargado cada día.
En mi trabajo el asunto de los manitos sigue igual, el otro puede hacer lo que se le antoje, total no tiene a quien rendirle cuentas y eso no puede ser bueno.
Quisiera cambiar totalmente de aires, pero me faltan dos asuntos para hacerlo, uno que si está a mi alcance es terminar de una maldita vez esa tesis que ya lleva un rato en el tintero y el otro es más problemático y es una cuestión económica.
Quería comprarme un iPod nano 3G y dejarle el 2G a mi hermana para su viaje a Colombia pero eso ya no va a pasar, seguiré con mi iPod adquirido a regañadientes en Japón, por cierto ya hace un año de aquel viaje.
En el aeropuerto como siempre tipos muy ensimismados, estaba yo levantando una credencial del IFE que algún desafortunado perdió y una señora casi me quería arrebatar el mostrador automático y cuando lo tuvo no sabía como emplearlo, obviamente no le ayude.
En la semana estuve escuchando argumentos de un par de chicas de provincia que ya llevan un tiempo viviendo en Ciudad de México pero no dejan de tirarle basura a la menor oportunidad, yo sostengo que gente egoísta, abusiva, ventajosa y mala onda te vas a encontrar en todos lados y acudir a la característica común de que son chilangos no te va a ayudar a salir del problema, eso no tiene nada que ver, si uno de cada 4 mexicanos vive en esta zona obviamente tus probabilidades de encontrar algún OGT se elevan enormemente, pero sin dejar de ser tú y sin perder tu esencia deberías ser capaz de adaptarte y no estar añorando tu tierra lo que no te reportara ningún beneficio, otra cosa que si suena la mar de ingenua es que con ver a una persona puedas saber que es tu amigo, ese un título que debería manejarse con sumo cuidado, no puedes decir que alguien que conociste hace tres semanas es tu amigo y menos andar buscando amigos en un gimnasio, lo cual es enormemente patético si en una primera instancia dices que tú no vas a perder el tiempo y te dedicas a tu rutina. ¿Pues quien te entiende? Ese es el problema, estás enojada y no sabes ni porque y ponerte en la actitud de todos los chilangos me odian no es la solución. No tienen idea de lo incomodo que es intentar escribir mientras viajas juntos a pesos pesados y los de la fila de adelante ya están durmiendo (¿cómo le hacen para dormir en un avión?, como les envidio)
Necesito vacaciones, que me dejen de sangrar, terminar mi tesis y alguna victoria externa no estaría mal, además siento que alguna actividad física me ayudaría a relajarme, hasta el fútbol de la empresa me ha agradado, pero el estrés de fallar los goles que hubieran cambiado el resultado no ayuda.
Y ya me canse de buscar a la mujer inteligente, buena onda, accesible, open minded, afanosa, divertida ….ya me lo ha confirmado Miss Neza, esas mujeres no existen.
Me he de convertir en un tío más que le tire a lo que se mueve.
Ayer fui con el ave del paraíso a Tlatelolco y vi a una morenaza que yo juraba que era Mayra, pero no, no fue así y yo que ni su teléfono tengo, pero ahí entra en juego otro conflicto, por un lado sostengo que dejaríamos de preocuparnos por que nos pinten el cuerno si dejáramos de Tirarle el can a las mujeres que ya tienen compromiso, pero si ellas no dieran oportunidad en su eterna búsqueda de algo mejor tampoco lo haríamos, porque digan lo que digan en la mayoría de los casos son ellas las que escogen.
También ayer con El ave del paraíso discutíamos de ello, en mi entorno yo podría jurar que México ya no es un país machista, las mujeres tienen las mismas oportunidades de estudiar y las mujeres que estudian ingeniería créanme que no sufren porque aparte de que tienen a un ejercito de compañeros que les ayudan, los maestros por muy estrictos que sean y hasta involuntariamente (y a veces muy voluntariamente) no son igual de rígidos con ellas, además de que si revisan los puestos de trabajo hay muchas vacantes con sueldos superiores que en sus requisitos está el sexo femenino, cierto es que hay muchas vacantes que las descartan a priori, pero como les dije en muchos puestos de salarios más altos esa diferencia de cromosomas juega a favor de ellas, pero esa es mi experiencia, la verdad es que en México sigue habiendo muchas mujeres golpeadas, muchas otras que lo soportan con tal de no trabajar, otras que le soportan continuas infidelidades al marido y muchas otras que han pasado embarazadas casi la mitad de su vida, en México hay una frase que dice más o menos así
La mujer y la escopetas, cargadas y detrás de la puerta.
Aparte la calidad del discurso de las feministas no ayuda a su causa, en muchos casos son de nueva cuenta mujeres que denuncian algo que nunca han sufrido y el modo en que lo hacen ahuyenta a las propias mujeres, en mi caso, como he crecido y vivido rodeado de mujeres cuando era más joven me declaraba abiertamente feminista hasta que conocí a mujeres que no le hacen ningún favor a esa causa y en su cabeza el ser feminista es estar compitiendo y viendo que genero es superior, somos diferentes y hay cosas para las que cada genero tiene más aptitudes, cosas como la superior capacidad multitarea femenina o la pésima ubicación que tienen muchas de ellas que son difíciles de debatir.
En resumen falta mucho por hacer en México y el debate que debería ayudarnos a plantear opiniones, puntos de vistas y buscar soluciones y acuerdos generalmente es envenenado con posturas absolutistas (y estúpidas) como las de la iglesias que lega a satanizar todo y declarar que todo es pecado y hasta el debate debe ser pecado porque de todo quieren ser el arbitro, eso es lo malos de los dogmas, su incapacidad de entender, comprender o adaptarse.
Otra cosa en la que México es verdaderamente un país del Tercer o hasta Cuarto mundo en es el gobierno, en la política, en la clase política que es una oligarquía plutócrata que por un lado desconoce un gobierno, por otro lado es el juez y el arbitro de la contienda, luego llega a acuerdos con tal de vengarse y luego se regala un auto para gente que de por si tiene sueldos muy dispares con los de la mayoría del país y que en el momento previo a una elección puede convencer a los más irreflexivos con regalarles dinero y en la otra esquina un montón de fanáticos religiosos que visten de azul que quieren imponer sus costumbre en las buenas conciencias mexicanas, y en otro lado un señor que vendería a su madre por su ambición política, cuanta razón tenían los de Molotov.
La falta de visión de nuestros políticos no es nueva y que se le va a hacer si es lo único que saben hacer, no es la primera vez que la coyuntura internacional pone el precio del barril de crudo muy alto, con todo y que el petróleo mexicano no es de los mejores y con eso excedentes que no estaban contemplados en el presupuesto de cada año no tienen idea de que hacer que no sea repartírselos por los buenos resultados de su dirección o en el mejor de los casos (borren eso del mejor y pongan el menos malo) repartirlos a los estados, con la infraestructura que tenemos en México hay montones de lugares donde esa inversión reportaría beneficios a millones, pero ¿Qué puede decir alguien que vive en un país sin trenes de pasajeros que sean útiles?
Si, la situación del país no me emociona, la apatía, la pereza y la resignación imperante son deprimentes, ya lo he dicho más de una vez y la respuesta ha sido impulsiva y visceral, pero lo digo de nuevo.
Hay muchos mexicanos que sobran. Y sólo están robando aires y oportunidades.
Ok, ya me extendí mucho, son las 11:47 hora de la Ciudad de México y acabamos de pasar por unas turbulencias
Allá por el lejano año de 1997, era yo un chaval de 16 años que compraba Cinemanía y Cinepremiere y “mataba” clases todos los miércoles para poder ver dos películas en el Macrocosmos que estaba en La México-Tacuba a la altura de Normal que todavía expedía boletos con únicamente la sala, nada de horarios, fechas, etc, lo que para mi economía precaria de estudiante que también compraba comics le resultaba muy favorecedor.
