Ya es Jueves por la noche, ya casi la mitad del viaje y yo....yo......no me quiero ir, ya estoy triste, me encanta estar en Japón, también se que la certeza de volver a México me ayuda y que mis gastos los este solventando la compañía seguro que me agrada, pero, ya extraño a los locos de la bicicleta, el paraguas de la mañana, los sonidos de los trenes, las calles limpias, los símbolos raros que no entiendo, el curry, el te verde, ir a la convini y comprar botellas atascadisimas de información que no comprendo, saber que estoy a unas cuantas horas de la meca de los freakis, ir en el tren sin gente hablando por teléfono, las marabuntas en las gigantescas estaciones de tren, las maquinas omnipresentes, el que me den las gracias por llegar a la caja a pagar mis compras y me sigan agradeciendo casi hasta que llegó a mi habitación, las school girls que andan por la calle todo el día, las bellas mujeres japonesas (de dientes feos si, pero linda sonrisa y obsesión por los accesorios) con sus piernas chuecas y su desconfianza por el gaijin oscuro que las mira insistentemente (je, je, je..)
Total, espero volver algún día y que mi japonés para ese entonces me permita desenvolverme con más facilidad.
Total, espero volver algún día y que mi japonés para ese entonces me permita desenvolverme con más facilidad.