Somos todos como hijos del último resultado.
El día de ayer fue largooooooooooooo, o no, más bien, duro exactamente lo mismo que el día anterior, pero se sintio muy, muy largo.
Me "levanté" con mucho pesar a las 6 y tantas de la mañana, me bañe y me encamine a Tepotzotlan donde sostuve una entrevista médica, de ahí regrese a casa, donde vi el ultimo episodio de la cuarta temporada de
Desperate Housewives (
nunca vi esa serie en TV, siempre en un monitor de computadora)parece que ya se termino por fin, y ojala porque cada día adquiría tonos más escandalosos, de ahí fui con el "eléctrico" porque tenía fundidos los focos de la señal de auto, lo cual explica porque recibía tantos recordatorios familiares en la noche, después de eso pase a una plaza comercial, pretendía ver
Indiana Jones, pero a esa hora sólo había funciones dobladas, me di unas vueltas y me fui a leer
comics a la sombra de un árbol, en eso hable con una amiga, acerca de su entrevista laboral y sus cuitas, me hablo otro amigo que me pedía un boleto para ver
Ironman, y ahí voy, de nuevo a la plaza comercial, pero ya era tarde para mi clase comercial, así que pase a la escuela donde doy clases de vez en cuando a dejar el boleto y recorri la distancia hasta mi escuela de japonés, medio comi algo y saliendo de mi clase pase a ver el segundo tiempo del partido
Santos - America por la vuelta d elos cuartos de final de la
copa santander libertadores 2008, fueron 50 minutos de agonía mientras cenaba, después de ello me encamine a casa y a las 11 de la noche pase a ver
Indiana Jones, había muchas más personas que el día Lunes que también vi Speed Racer a las 23 horas, como me pasa con Speed Racer, no conozco el material original y solo puedo hablar de la cinta actual, pero eso ya saben donde.
Llegué a casa y por fin dormí, unas 5 horas o menos porque había que llegar temprano a trabajar el día de hoy, ya les avise que me voy y parece que lo tomaron más que bien.
el nuevo vehículo dirigido a explotar nostalgias, pero éste no es para saquear los bolsillos de los jóvenes de los ochenta, no, Speed Racer va dirigido a diferentes generaciones, a los que tienen casi 50 en Japón, a los que van para los 40 en los EUA y los que van saliendo de los 30 en América Latina, pero además más cercano a los que pasa con King Kong y Superman Returns, el director (en éste caso la dupla) de verdad que quiere contar una historia que a ellos les gustaría les hubieran dado de niños, no se están guardando nada y se nota su preocupación por que no parezca solo una película de carreritas que parecería más apropiada para la versión cinematográfica de un híbrido de Burnout, Need for speed, F-Zero y otros, no, le han querido dar una justificación a esas secuencias de acción que muy en su estilo no se mezclan con las también largas secuencias de diálogos.